LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES Y EL MUNDIAL DE FÚTBOL

Politica y FutbolPor azares del destino, desde su origen en 1930, los mundiales de fútbol han coincidido con los períodos presidenciales y las elecciones en Colombia. La única excepción fue el de Suiza, en 1954, que se llevó a cabo cuando el general Gustavo Rojas Pinilla completaba su primer año como dictador.

En 1970 la televisión nacional transmitió el Mundial en vivo por primera vez. Mientras Misael Pastrana y Rojas Pinilla terminaban de resolver su enfrentamiento en las urnas, los colombianos se deleitaban con los goles del Mundial de México. Sin lugar a dudas, la pasión por el fútbol apaciguó la ansiedad e incertidumbre generada por la tensa situación política.

En Chile 1962, con tan solo unos cuantos periodistas radiales transmitiendo la fiesta del fútbol, la participación de la Selección Colombia dirigida en esa época por el maestro Pedernera, quedó opacada por la fuerza del Frente Nacional. La situación política que vivía el país tuvo más relevancia que el 4-4 obtenido contra la Unión Soviética.

En Italia 1990, la Selección Colombia regresó al Mundial. Ese mismo año, César Gaviria y su lema: “Bienvenidos al futuro” llegaron al poder. El sobresaliente desempeño del combinado nacional sirvió para aclimatar en algo el agitado ambiente político generado por la Asamblea Constituyente y el sometimiento del cartel de Medellín a la justicia. Cabe recordar que, hasta entonces, no temíamos segunda vuelta presidencial.

Ese mecanismo se estrenó en 1994, un día después de la derrota contra Rumania. El triunfo de Ernesto Samper sobre Andrés Pastrana hizo sentir que, aunque nos habían derrotado en el Mundial de Estados Unidos, los ciudadanos cumplimos en las urnas y finalmente la democracia triunfaba en nuestro país. No obstante, una semana después se revelarían los vínculos del narcotráfico con la política y el fútbol. La derrota de un equipo amenazado, a lo que se sumaron el fatídico autogol de Andrés Escobar y la denuncia de los ‘narco-casetes’, hicieron que tanto la Selección Colombia, como la Presidencia fueran asociadas con el tráfico ilegal de drogas.

En 1998, la segunda vuelta electoral se llevó a cabo un día antes de que la Selección jugara su segundo partido en el Mundial de Francia. El triunfo de Pastrana, quien en aquel entonces se comprometió a negociar con las Farc, estuvo acompañado por la derrota frente a Rumania, el triunfo sobre Túnez y la imposibilidad de clasificar ante la encopetada Inglaterra. Al final, fracasamos rotundamente, tanto en el Mundial como en el proceso de paz con el que se comprometió Pastrana.

En 2002 y 2006, Colombia no clasificó. El hoy senador Álvaro Uribe ganó en ambas oportunidades en primera vuelta. En esos ocho años, el desinterés por el deporte coincidió con estas dos ocasiones de relativo distanciamiento entre política y fútbol.

En 2010, la segunda vuelta electoral coincidió con el Mundial de Sudáfrica, al que Colombia no clasificó y mientras otras selecciones de Suramérica jugaban, dio como contundente ganador al hoy presidente Juan Manuel Santos, luego de que se apagara, a las buenas, a las malas y por errores propios, la llamada “Ola Verde” mockusiana y su “yo vine porque quise, a mí no me pagaron”.

En 2014, la relación entre fútbol y política se intensificó. A diferencia de lo sucedido en el octenio anterior, el gobierno Santos le dio mucha importancia al ámbito deportivo, y así lo confirman el desempeño de la delegación colombiana en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y la intervención en la escogencia de José Néstor Pékerman como seleccionador de Colombia. Sin embargo, mientras que los jugadores de la tricolor los quería todo el país, el primer mandatario perdía popularidad entre los ciudadanos.

Se utilizó el desempeño de la Selección como un presagio del triunfo del entonces presidente-candidato Santos. En esa ocasión, Colombia debutó frente a Grecia un día antes de la segunda vuelta. El triunfo claro y tranquilo fue bien utilizado para apalancar el resultado de la segunda vuelta.

A Pékerman y sus jugadores les correspondió la versión positiva del proceso: con mensajes positivos, cantos, alegría y salsa choke animaron a un país políticamente fragmentado. El retorno de la Selección luego de ser eliminada por Brasil generó sentimientos de unidad y solidaridad, que mitigaron en algo las diferencias ideológicas entre la gente.

Este junio de 2018 guarda cierta semejanza con lo sucedido en 1998: la segunda vuelta es el 17 y Colombia debuta contra Japón el 19. Hasta ahora ningún candidato se ha apropiado de la Selección y sus figuras, ni los patrocinadores respaldan a ninguna campaña abiertamente. Por su parte, los jugadores, quienes en su mayoría viven fuera del país, tampoco han hecho declaraciones públicas al respecto.

El Mundial de Fútbol funciona como una especie de bálsamo estabilizante después de las elecciones. Es innegable que el fútbol genera una especie de stand by refrigerante, donde hasta las más severas discrepancias pasan a segundo plano. Mientras los políticos digieren los resultados y se preparan para llegar al Congreso y a la misma Presidencia, los colombianos gritaremos “gol” al unísono.

***Tomado de: www.elespectador.com

Etiquetas: Radio Diez,, Politíca,, Selección Colombia,, Elecciones Presidenciales,, Segunda Vuelta,, Mundial de Fútbol,, Colombianos,

ImprimirCorreo electrónico

Visitas Radio Diez Internacional

010888354
Hoy
Ayer
Esta Semana
Última Semana
Este Mes
El mes pasado
Total
1589
7484
41108
10158503
137128
111744
10888354
Your IP: 3.237.232.196
2024-03-29 08:35

Mundo Visitas

SIGANOS COMO

RADIO DIEZ INTERNACIONAL Y DOSSIER DE NOTICIAS

    En todas las redes sociales

    90dd9f12fdd1eefb8c8976903944c026 icono de facebook logo by vexels Logo Twitter Redondo Logo WhatsApp Logo Instagramwhast