CIUDADANOS DEL NORTE DE POPAYÁN SOLICITAN RESPALDO EN DEFENSA DE ÁRBOLES
Foto bajada de internet.
Una veeduría se conformó luego del inicio de obras del Sistema Estratégico de Transporte Público de Popayán en la carrera 6ª entre calles 33 y 46 Norte, desde Villa Mercedes hasta el puente nuevo sobre el río Cauca, cuyo propósito es el de conservar y proteger a los árboles plantados a la orilla de la vía.
La Corporación Autónoma Regional del Cauca, CRC, autorizo talar 68 árboles.
“Cuando nos socializaron las obras, vimos que iban a ser sacrificados prácticamente todos los árboles.
Por eso, solicitamos un recorrido con el equipo del contratista para evaluar uno por uno los árboles y asegurarnos de que sí era necesario talarlos para ampliar la vía”, indicó María Teresa Amaya, veedora del patrimonio histórico y natural de Popayán.
En ese sentido, entendieron y accedieron a la tala de la mayoría de árboles ubicados a lo largo del andén. Además, porque varios de ellos estaban enfermos y viejos, y otros porque forman follajes grandes que pueden desgajarse y representar riesgo para personas y vehículos. “Bajo estas consideraciones nosotros concedimos, aprobamos y trabajamos con la interventoría y el contratista, identificando los árboles que se podarían o talarían. Logramos que los más pequeños fueran trasladados a la orilla de la ciclo vía y que los de compensación por los talados, se siembren en las cercanías”, explicó la veedora.
Sin embargo, ocurrieron algunas situaciones que provocaron la molestia ciudadana. Lo primero fue que tras el recorrido por los árboles, no se les avisó que pocos días después comenzó la tala y se cortó un guayabo que no habíamos previsto y que servía de refugio y alimento para aves.
Luego se talaron unas ‘guaduillas’ o chusques donde se había recomendado por parte de los veedores que se tuviera cuidado con los nidos, aunque dijeron que los encontraron vacíos, “pero como fue sin nuestra presencia, no podemos asegurarlo.
Después quedó en discusión la defensa de tres árboles (un guayacán, un cachimbo y un olmo) para que no fueran talados “y se había acordado hacer un estudio para estos porque están retirados del andén y podrían permanecer, pero como el diseño de la obra implica tener una bahía, entonces se afectan sus raíces. Pero el miércoles 16 de abril, con presencia de dos veedores, se decidió talarlos. Sin embargo, hablando con el resto de los veedores dijimos que no, porque el daño ha sido demasiado.
*Fuente: El Nuevo Liberal.
